Hable más fuerte, tengo una toalla

"Cada vez que hablo con mi hermana me peleo ¿Tengo que dejar de hablar con ella?"
Esto me recordó una situación parecida pero diferente, una paciente que venía trabajando conflictos en el trabajo, quería saber si le convenía hablar o quedarse callada, y el hecho es que a veces hay que hablar y a veces hay que cerrar la boca. El problema de esta otra mujer con su hermana es distinto, sólo tiene en común el problema de llegar a la disyuntiva de hablar o no. No hay una situación de puja de intereses, lo que pasa es que la hermana anda con problemas cognitivos. Un poco por los años, y otro poco por los años de beber, empieza a tener más confusiones, una memoria débil, y pierde el hilo. Sobre esto, es mal llevada, asi que ante la duda desconfía y pelea.
También la respuesta es distinta.
¿Cómo se llega desde la simple pérdida de memoria a la ideación paranoide? Un factor clave reside en la diferencia entre el olvido psicológico y el deterioro de la memoria.
Cuando olvidamos algo por causa psicológica, es porque estábamos pensando en otra cosa, porque no queremos acordarnos de eso, o no queremos acordarnos de algo asociado (más o menos), es decir que siempre se trata de un acto psíquico, un proceso o comosellame, pero el olvido queda ligado a un recuerdo, por así decir, queda registro de que algo pasó con es información. Cuanto te olvidás algo, sabés que te falta algo.
Cuando la memoria se deteriora, en cambio, no se debe a un proceso mental, sino a un daño orgánico del que no existe ninguna noticia, porque la neurona que muere no avisa. Como la memoria además es plástica y se autocompleta, resulta que si no encuentra los datos para construir un recuerdo, toma los que encuentra. Mejor dicho, a falta de datos originados en la percepción, construye recuerdos con datos provenientes de: 
-otros recuerdos
-relatos
-fantasías
-ficciones
Estoy hablando de la memoria evocativa, la función psicológica del recuerdo que llaman "memoria episódica", diferente de la capacidad del tejido neuronal de retener información, que también debe tener su mecanismo de automantenimiento.
Y como esa información ocupa el lugar de algo que provenía de la percepción, obtiene la misma creencia que cualquier percepción.
El recuerdo falso, "fabulación" en la jerga, tiene grado de certeza, es incuestionable.
Lo mismo con las fallas de atención y la interpretación de frases: si una persona con deterioro orgánico de la atención escucha frases muy largas, se pierde la mitad y toma lo que escuchó por una frase efectivamente dicha por el interlocutor.
Cualquiera se da cuenta de que en estas condiciones la solución no pasa por hablar o no hablar con la persona demente. Lo que en principio hay que hacer es saber como hablar.
A mi paciente de hoy le dí dos pautas básicas:
Frases cortas. Por lo que dije más arriba, hay que usar sujeto y predicado bien simple. Nada de enumeraciones largas, ni muchos adjetivos. Piensen en el ejemplo de la publicidad superliminar.
Lenguaje concreto. Usar expresiones que se refieran a cosas, personas o acciones y en lo posible sólo afirmativas. No tiene sentido citar frases ajenas porque va a entender que son afirmaciones tuyas.
Estas son reglas que están en los manuales, no curan, pero evitan problemas.
Hay otras, no es cuestión de hacer acá una compilación. 
O sí. Otro día.

Comentarios

  1. Hijos pidieron llave de mi dpto. Le di a hijo 1 un juego, más un juego copia para que le diera a Hijo 2. Hijo 1 niega que se lo dí, hijo 2 niega haberlo recibido. Recuerdo el instante preciso, el lugar de la mesa, la ropa que tenía hijo 1 al recibir ese llavero.
    No hago otro juego copia. Alguien no quiere darlo o alguien no quiere recibirlo.

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