Entradas

Mostrando entradas de febrero, 2022

A seguro se lo llevaron preso

Así como tenemos 44 millones de directores técnicos, tenemos 44 millones de psicoanalistas. Y por supuesto, tenemos un ramillete de explicaciones trilladas a mano para dar cuenta de cualquier situación. Todas estas explicaciones no se despegan del animismo, es decir que remiten cada fenómeno a una causa que siempre es alguna especie de entidad a la vez simple, inanalizable y paradójicamente capaz de provocar los efectos más diversos porque es como el gusano que desafió a Eru cuando el origen del mundo.  Algunos ejemplos de moda: el estrés, la ansiedad, el "estrés postraumático". Son todos términos que de algún lado salieron y se popularizaron. Se diferencian de otro tipo de explicaciones "esencialistas" del tipo "soy fóbico", "soy bipolar", o "soy neurodivergente", que como se ve pasan por la identificación con un tipo especial (esto conecta con los "carácteres de exepción", sobre los que pueden leer un texto muy interesssszzz

Todos dicen lo mismo.

Estuvo en boca de todos el tema de la violencia. Un señor que es figura pública, referente de la lucha por los Derechos Humanos, agredió a una mujer. Con muy pocas excepciones, el veredicto de la opinión fué "es un violento". Casi nadie se limitó a condenar el acto, sino que todo el mundo parece ver con naturalidad el tipo de atribución del ser, que en el fondo es el mismo que el discurso de la peligrosidad, que se critica en otros lugares. Uno puede repasar las veces que quiera la falacia de afirmación del consecuente, sin que esto cambie nada, porque el mecanismo es otro: en realidad se trata de un chivo emisario. Es un rol social que el grupo asigna a uno de sus miembros para alimentar cierta fantasía de que el problema es esa persona, y que una vez expulsada todo va a andar bien. Necesitan al chivo emisario tanto más cuanto más grandes sean sus propios problemas de los que no pueden ocuparse. Como no soy psicólogo social, no voy a opinar respecto de cómo se maneja esta di