La casa del ser

Se acuerdan de esa frase "el habla es la casa del ser"? En la carrera de psico la remachaban sin descanso. Y para desilusión de los liberales que lloran por el adoctrinamiento universitario, cuanto más lo repetían, mas sonaba a chamuyo, o mejor dicho metachamuyo: las cosas que parecen ingeniosas pero que se usan para predisponer a la gente a creerse los chamuyos.

Dejemos a un lado el existencialismo. Hoy aprendí que los que llamamos sordomudos no son sordomudos. Ellos tienen voz y la pueden usar.

Me lo explicó un colega que trabaja con sordos, usa lenguaje de señas y le explica a los médicos que hacen implantes cocleares por qué no se resuelve todo con un aparatito.

Por qué es necesario que los chicos aprendan el lenguaje de señas aunque después puedan recibir un implante.

Me explicó que por más que consigan oír con un aparato siguen siendo sordos, y y que construyen su identidad incluyendo esa condición como un rasgo propio.

Lo que más me gusta de mi trabajo es conocer de la vida de las personas lo que realmente les interesa, esas cosas que los vuelven locos. Así que cuando un loco se suelta con su tema, yo aprovecho y aprendo.

A veces aprendo respuestas a problemas que ya no tengo.

Como aquella paciente con sordera y esquizofrenia que escuchaba voces. También tenía episodios de "excitación psicomotriz" y un leve retraso mental. Todo los cual es culpa de la sociedad porque... PORQUE NO LE ENSEÑARON A HABLAR DESDE EL PRINCIPIO.    

Yo no creo que el lenguaje sea una casa. Sé un poco de albañilería y puedo decir que un requisito básico de una casa es que el habitante quepa adentro. Y las personas no caben en el lenguaje, asunto terminado.

Eso no quiere decir que el lenguaje no sea indispensable. De hecho estoy convencido de que es anterior al homo sapiens: los humanos modernos evolucionamos para adaptarnos a la existencia del lenguaje, por eso tenemos sectores del cerebro dedicados específicamente a eso.

Aunque sería mejor decir que el lenguaje cumple funciones indispensables (y sirve para otras cosas más dispensables, pero que están buenas).

Hay personas que nacen privadas del sentido que usamos para entender la lengua. También hay personas que pierden la capacidad de hablar por un accidente. Un ACV puede hacer que el paciente quede reducido a sólo poder contestar si/no con movimientos de ojos. Para que pueda decir algo hay que mostrarle una tabla con el alfabeto dividido en grupos para que vaya seleccionando como en esos trucos de magia donde tenés que elegir un palo, par o impar, etc hasta llegar a un número.

Cuando no tenés forma de articular palabras, la comunicación tiende a reducirse acercándose al mensaje único. 

Nosotros, los psicólogos, lo que hacemos es meter más cartas en el mazo.