Interceptación

Si yo digo interceptar, lo primero que viene a la cabeza son escenas de combate aéreo. Intecepción es lo que pasa ahí: un avión llega a donde está volando otro y paf, lo baja.
Como soy malpensado, creo que también les pasa lo mismo a los que confunden interceptación, que es un sígno característico de la esquizofrenia al punto de que por sí solo hace diagnóstico, con la intrusión, que es como quieren llamar a las ideas obsesivas los que no creen que esas ideas sean propias de la persona.
Por supuesto: las terapias basadas en la evidencia pueden mostrar una estadística perfecta al respecto: de N casos de ideas "intrusivas", indagado si las mismas guardaban relación con el tema en que estaban pensando, para el total de N se comprueba que no.
La discusión parece no tener cierre, porque si uno dice que esa discrapancia entre el curso de ideas voluntarias y el de las intrusivas es el resultado del mecanismo de defensa que evita que las ideas reprimidas lleguen a la consciencia, te dicen que una afirmación infalsable porque da pie a afirmar cualquier cosa, porque si no se detecta tenés una hipótesis ad-hoc que te salva.
Así de idiotas son.
No es posible afirmar cualquier cosa porque existe una forma de detectar. 
Por empezar, completemos la afirmación con el detallito de que las ideas intrusivas son un síntoma de que los mecanismos de defensa fallan. Parcialmente.
Y ahí es donde se vuelve importante la diferencia clínica entre intrusión e interceptación.
Pero antes de comentar eso, hay que hacer una aclaración para que nadie que no sea del palo se vaya con una impresión errónea.
Las interceptaciones y las intrusiones ni siquiera se parecen en lo manifiesto, ni digamos los pensamientos alucinatorios, que son cosas que no llegan a ser voces, sino que el alucinado las describe e identifica correctamente como pensamientos, pero que son pensados por otro, adentro de su mente.
Y la diferencia de base es la misma que la que hay entre la represión en las personas normales, y la fragmentación en la psicosis.
Pero yendo a la "semiología", decimos que hubo una interceptación cuando el paciente viene hablando y se corta de golpe, queda en suspenso, y arranca de la nada con otra cosa, otro hilo que toma por la mitad. Hasta ahí no hay mucho, pero la cosa es ver qué puede hacer con eso. Y la respuesta es que no puede hacer nada, y tanta nada puede hacer que si al loco lo aprietan para que vuleva sobre lo que venía diciendo, o si le preguntan por el principio de la frase conque arrancó por la mitad, se engrana, asume que lo estás cachando y si te descuidás te agarra a mamporros.
En cambio, cuando un obsesivo anda captado por una idea de las suyas, la reconoce de lejos, porque justamente son pensamientos que ya tuvo, son fragmentos irreconocibles, secundarios o sustitutos de ideas que no quiere tener. Entonces empieza por resistirlas, trata de distraerse, busca y pide recetas de pases mágicos para hacer que se vayan. Pero sobre todo, y aunque por regla general son muy difusos a l a hora de referir el texto concreto de sus ideas obsesivas, son muy capaces de hablar de lo que estaban pensando, y si los dejás se pasan la sesión hablando aliviados de tener una excusa para ocuparse de otros temas.
Todo esto es comportamiento, como diría Bleger, son observables, no hay nada místico ni inefable.
Debe ser por eso que estas cosas se fueron dejando de lado en las publicaciones. No atraen.


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