La lección de Piaget

Es sabido que a los servicios de salud mental se les pide que los individuos se adapten a la sociedad.
Sabido y criticado. Criticado y olvidado. Olvidado y naturalizado.
Porque después de décadas de antipsiquiatría, Fucault, Lacan, Laing y Goffman, la psicología de la adaptación vuelve a colarse por la ventana de la "evidencia".
Al fin y al cabo, no está tan mal: es cierto que nadie es amo del bien ajeno, pero si un pibe chorro se adapta lo suficiente como para ir al colegio, es casi seguro que va a vivir más años.
Y que el asunto del bien lo discuta con dios.
También es cierto que adaptarse es algo para lo que casi siempre nos piden ayuda. No somos ningunos carceleros sádicos adaptando a pobres diablos en sesiones de tortura hasta quebrarlos y convertirlos en una plastilina que moldear.
Punto aparte para una cuestión "contratransferencial": si te tomás en serio el lugar terapéutico siempre te molesta un poquillo que los pacientes sean muy específicos con lo que piden. La terapia no es un restorán a la carta, no podés caer con una bruta depresión, por ejemplo, a pretender que analicemos por qué soñás con latas de duraznos. Qué tanto.
Pero hay que superar eso: el que pide, aunque todos los tomos de EL SEMINARIO se empeñen en que no sabe lo que quiere, por algo pide, y no está obligado a andarse con tanta pregunta.
Más que nada, la adaptación no es algo que las personas elijan, es algo que también les pasa (googleen "trastorno adaptativo", si no) y necesitan apoyo, orientación y contención con eso, como con cualquier otro problema. 
Pero también les pasa que se ven envueltas en la ideología de la "adaptación al cambio", porque tienen que vivir de su trabajo, y el trabajo cambia. El verdadero mensaje es "adáptense a lo que necesitamos".
¿Qué les vamos a proponer, que se rebelen, que sean hippies, que sean pobres, que sean emprendedores?
Si tuviera estómago para eso estaría tomando tequila bajo una sombrilla en Cancún, y no escribiendo desde el living comedor en Parque Patricios.
En lugar de eso prefiero recordarles el concepto de adaptación según lo aprendimos de Jean Piaget, un biólogo que terminó desarrollando una rama de la psicología porque quería responder una pregunta epistemológica.
Piaget describe los procesos de adaptación como respuestas del un sistema complejo al entorno, que se dividen en dos mecanismos opuestos:
La "acomodación" es la forma en que el sistema se modifica en función del entorno.
La "asimilación" es el conjunto de modificaciones que el sistema produce en el entorno para aprovecharlo.
Olvidarse de la asimilación es la ideología de quienes ya dominan el entorno y no están dispuestos a arriesgarse a que esa situación cambie.
Recordar que adaptarse implica también asimilar es una forma de poner el foco en las posibilidades de aprovechar lo mejor posible el entorno para nuestros propios fines.

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