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Mostrando entradas de enero, 2021

Terapia familiar

Cada profesión se podría definir en base a las cosas que hay que aclarar infinitas veces y nunca se entiende. En el caso de la psicología, es que la terapia no sirve para solucionar cualquier cosa que se les ocurra.  ¿Pero ustedes no son psicólogos, no es que entienden estos temas?¿Por qué no lo solucionan? Exacto: porque lo entendemos les decimos que no lo podemos arreglar. Hay problemas, por ejemplo que son de conducta, y la conducta estamos convencidos que tiene determinaciones psicológicas. Y las podemos conocer, lo que no podemos hacer es que la gente cambie como se nos canta. Esto para no hablar de los síntomas como obsesiones, fobias, alucinaciones y soponcios. Pero si hay una problemática que suscita los mayores malentendidos, que ocasiona las indicaciones más desubicadas, y los papelones más groseros, son los maridos violentos. Seamos claros: Cuando se SOSPECHA violencia, hay que consultar un PROFESIONAL CAPACITADO. Cuando HAY violencia, hay que apoyarse en un EQUIPO INTERDISC

La lección de Piaget

Es sabido que a los servicios de salud mental se les pide que los individuos se adapten a la sociedad. Sabido y criticado. Criticado y olvidado. Olvidado y naturalizado. Porque después de décadas de antipsiquiatría, Fucault, Lacan, Laing y Goffman, la psicología de la adaptación vuelve a colarse por la ventana de la "evidencia". Al fin y al cabo, no está tan mal: es cierto que nadie es amo del bien ajeno, pero si un pibe chorro se adapta lo suficiente como para ir al colegio, es casi seguro que va a vivir más años. Y que el asunto del bien lo discuta con dios. También es cierto que adaptarse es algo para lo que casi siempre nos piden ayuda. No somos ningunos carceleros sádicos adaptando a pobres diablos en sesiones de tortura hasta quebrarlos y convertirlos en una plastilina que moldear. Punto aparte para una cuestión "contratransferencial": si te tomás en serio el lugar terapéutico siempre te molesta un poquillo que los pacientes sean muy específicos con lo que pid

El catecismo sexual

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La chica se lamenta de que nunca había hecho el amor, porque en sus relaciones el sexo era vacío. Estas cosas existen. Décadas? de revolución sexual y el sexo sigue separado por una cinta policial moral más sospechosa que un perro en una carnicería. A Freud se lo criticó justamente por separar la sexualidad femenina en vaginal y clitoriana. No vale la pena defenderlo: que era resentido con las mujeres lo dijo explícitamente más de una vez.  Pero la sociedad es tan moralista que hubiera encontrado excusas para patronizar el sexo hasta en la física cuántica. Tampoco hay que creer que el psicoanálisis inventó eso del sexo bueno y sexo malo. Es tan vieja la cosa que ya aparece en El Banquete de Platón, en el discurso de un tal Pausanías, que ya hablaba de una Afrodita virtuosa y de una vulgar, de que la gente las confundía, etc. En suma: que era vulgar y propio de esclavos dejarse cojer por gusto, y bueno y virtuoso dejarse cojer por hombres sabios. Flor de turro. No parece la misma cosa,

La perversión

Acá sólo se van a encontrar con obviedades, así que hoy me voy a detener un poco en algo que los sociólogos... los marxistas en realidad, recalcan siempre que se habla de psicología: que nuestro lugar en las relaciones de producción determina nuestras ideas. Yo no acuerdo con la idea de la determinación, creo que la psiquis es individual y lo será hasta que se invente la telepatía efectiva: por más que se comparta un lenguaje, un espacio, una clase y hasta la comida, nos desarrollamos en cuerpos separados. Radicalmente desconectados. Peeeeero... También tengo la certeza de que nuestro pensamiento no es intencional, no es voluntario. Cualquiera que haya hecho el experimento de no pensar algo que está pensando lo puede comprobar. Tal vez haya personas que tienen un teatro interno muy obediente, y se dicen a sí mismos cosas elegidas y redactadas a propósito, todo dentro de su cabeza. Los felicito, son excepcionales: pero no son normales. Ni hablemos de elegir voluntariamente las creencias

Un gurú del desamor

El paciente de hoy me atiende animado, casi eufórico "Te acordás lo que me dijiste la semana pasada?" (nunca me acuerdo, pero lo que importa es lo que mi paciente recuerde ¿nocierto Lacan?). "Sos un gurú, fué todo como dijiste, sos un genio, no lo puedo creer" Lo que pasó no guardaba mucha relación con el ánimo del pobre flaco, que se centraba exclusivamente el festejar mi acierto. Si acaso por eso sólo le mejoré un poco el mal trago. Acertar en las cosas humanas a veces es muy fácil, así como a veces es imposible. Depende del marco de referencia y de la información de que uno disponga. Por ejemplo, si me preguntan "x va a poder conducir un automóvil" y los datos de que dispongo son "unos cuestionarios y dibujos de x": bueno, papito, no me pidas que cabecee. Son conductas que no tienen mucha relación funcional. Para que vean que no es cuestion de cantidad de información, sino del valor de la misma, pongo otro caso: Le pedimos a y que repita tres

Fatiga

Cuidar cansa. Cuidarse cansa, cuidar a otros cansa, es trabajo. Hay que reconocer que no sólo hacer maniobras protectoras cansa: evitar otras cosas, o simplemente no hacer algo cansa. Cuando una persona se cansa del cuidado, pasan cosas que van desde cometer errores a cometer suicidio. Algunos se dan "un permitido", que es como hacer un paréntesis de la realidad, o del continuo espacio-tiempo, para ir a descuidarse en un mundo imaginario por un rato.  Otros "relajan", que es algo así como barrer para la suegra, se cuidan "a reglamento", en el fondo, aceptaron a medias una posición negadora, pero una parte de su mente les dice que se cuiden. Por supuesto, a esa voz interna que da órdenes sólo se le obedece lo justo y necesario para que se calle. Hay gente con espíritu deportivo, que desde el principio juega con el peligro, poco o mucho. Cada tanto se hacen daño a sí mismos o a otros, pero esos accidentes simplemente le dan sentido realista al juego. De pasa

Eso ya lo contaste

Uno de los problemas que trajo la cuarentena es la convivencia forzada con personas mayores, que antes podían pasar el día en centros de jubilados, agencias de quiniela o plazas. No fué solo el encierro, sino la falta de personal de asistencia. Ahora ya no parece tan acentuado, porque la gente circula, pero también pasa que se contagia y se tiene que aislar, y no siempre se consigue suplente. Pero la enseñanza debería quedar: cuidar personas mayores no tiene nada de romántico. Como dijo alguien una vez "hay un antes y un después de limpiarle el culo a tu propia madre". Es cierto que la parte escatológica del tema se pasa en silencio. Y no por un tema de imposibilidad, sino porque casi todos se encuentran conque la caca no es algo insoportable, sino que cualquiera se acostumbra. A lo sumo puede que la gente sienta vergüenza de admitir que, como todos, puede servir a otro sin morirse. De las quejas más frecuentes que traen al consultorio los cuidadores de viejos me viene a la m

Signos de alarma

Me acuerdo de un médico que para explicar su odio al psicoanálisis daba el ejemplo de una "psicóloga" que decía de un paciente con cáncer en el cerebro "que convulsivaba por los conflictos con la familia". No quiero ser prolijo, así que vamos a dejar de lado la sospecha de que el señalamiento de la colega no es para nada incompatible con la patología orgánica: el tipo se raya con la familia, pero como tiene un tumor, en vez de enojarse, se le llena el mesencéfalo de disparos sinápticos que se retroalimentan y tiene una convulsión. No hace falta ser brutos con la gente de otras disciplinas, sólo hace falta no poner mala voluntad. Ahora sí que es cierto que en la psicología cunde una fuerte postura "antiorganicista". Me pasa muy seguido que haya interconsultas que se demoran o nunca llegan a pedirse porque el terapeuta se resiste a recomendar una visita al médico o psiquiatra. ¡Esa maldita costumbre de apropiarse de los pacientes! ¡Y esa otra maldita costumb

Por qué los celosos son cornudos.

No hay persona celosa, "toxica", que no tenga a mano la explicación biográfica: "yo soy así porque me lastimaron", "tuve un novio mujeriego", etc. La constancia de estos testimonios hace muy fácil caer en la naturalización del sentido común que constatan. Después de todo ¿por qué no? Es la explicación más simple y da cuenta de todos los elementos: las infidelidades hacen celosa a la gente, tanto como los traumas la harían fóbica, por eso todos los celosos tienen algún antecedente real. El primer obstáculo a esta teoría es igualmente simple: la realidad. Los celos nunca nacen de la realidad.  ¿Y eso como lo saben?¿Cuál es la evidencia? Ya vemos que se ponen a la defensiva: antes que nada la duda. Pero vamos a darle la derecha, porque no estamos haciendo terapia. No es sólo que los celos siempre son desproporcionados, también resulta que como todo prejuicio, no son la consecuencia de una inducción, sino la expresión de un sentimiento de rechazo profundo. El

Destinos marginales

Se sigue hablando de la libertad de expresión. Ahora porque un nazi protesta que lo cancelan. Ya todos tienen aprendida la paradoja de Popper así que no vamos a machacar con eso. Además, seguiríamos en el ámbito de la comunicación.  La comunicación está sobrevalorada. Está muy bien que desde Peirce en adelante nos hayan abierto los ojos acerca de cómo los signos son nuestra ventana al mundo real, y está súper bien que Jackobson y Levi-Straus nos haya revelado hasta qué punto el orden simbólico prolifera por doquier. Pero la conciencia de las determinaciones simbólicas nos encandila y nos lleva a creer que es lo único que hace falta. Típica fantasía de chico estudioso: soñar que el ingenio puede gobernar a la fuerza bruta. Un libro que leí hace mucho "El imperio de la razón y el silencio de la diferencia" explica esto: la impotencia del dialoguismo habermasiano. El autor es Carlos Alemian. Básicamente se centra en cuestiones políticas, políticas de sudamérica frente al primer

Ghandi el gran hombre terco

Había una vez un tipo que sentía que tenía que empujar todo el tiempo para que pase algo (es una ilusión retroactiva: lo cierto es que no podía dejar de empujar), entonces inventó la relación causa-efecto: se dijo que nada pasaba en el mundo sin que alguien o algo lo estuviera moviendo. Cuando vió que no siempre era así, inventó las causas invisibles. Cuando lo corrieron de todos lados se dedicó a la psicología y le dijo a la gente: para que algo cambie, tienen que hacer algo. De ahí en adelante la gente de preguntó al psicólogo "¿Qué tengo que hacer para no pensar en esto? ¿Qué tengo que hacer para encontrar pareja?¿Qué tengo que hacer para tener ganas?" El hecho es que ya nadie sale conforme si no le dan órdenes. Las órdenes son a la psicoterapia lo que las pastillas a la medicina orgánica. Se esperan como algo tan obvio que nadie se acuerda que hace no tanto ni siquiera existían. Las pastillas, las órdenes siempre estuvieron de moda. Deberían aprender de Ghandi, que hizo d

Cómo sabés de eso?

Vengo a hacerme autobombo. En mi defensa, lo necesito. Hoy fué por un comentario acerca de técnicas de moldeado industrial, la otra vez por tener una noción básica de informática, tal otra vez por saber qué tiene que ver Pantone con la pintura. El comentario soprendido de la gente nunca me toma por sorpresa y me halaga al mismo tiempo que incomoda. ¿Cómo es que un psicólogo sabe cosas prácticas? Sí, sí: mis viejos eran técnicos, me crié entre aparatos de medición, fusibles, destornilladores y torniquetas. Pero ellos nunca supieron qué es "pre-prensa" y yo sé. En casa nadie manejaba un excel y yo me defiendo. Etcétera. La mayoría de las cosas que aprendo vienen de mis pacientes. Y no sé cómo hacen muchos colegas para que no se les queden esos detalles. Si hay algo que tiene sentido en este rubro es entender la vida de los demás, no sólo sus enfermedades, sus manías y taras mentales. Lo mejor es cuando te cuentan cómo viven. Y hay que poder representarse las cosas que les inter

Horarios y urgencias

Me llama, por whatsapp. No atiendo porque estoy atendiendo. LLama por el teléfono. No atiendo. ¿Deja mensaje? Nooo: llama al OTRO teléfono. Llama al OTRO whatsapp. ¿Deja mensaje? Noooo ¿Escribe? Noooo. Llama... Las tradición hace del curador una especie de tutor legal del paciente, un recurso personal que se vuelve incontestable, irreemplazable, irrenunciable. Pasa con los pediatras. Con los obstetras. Con los dentistas. Con los veterinarios. Cómo no iba a pasar con los psicoterapeutas. El único lugar donde al médico lo llamás a cualquier hora y va, es en el medio del campo.  En esos pueblos donde hay un sólo doctor en leguas a la redonda. También hay poca gente, así que en muchos casos alcanza.  Algunos de los que llaman en cualquier momento dicen "Pero sos MI psicólogo ¿a quién voy a llamar ante una emergencia?" ¡Al servicio de URGENCIAS! Vamos con lo más simple de entender: Si el terapeuta trabaja con tiempos pautados, sesiones donde la técnica exige que el rapport no se i

Discutir con psicópatas

Durante el macrismo se puso de moda hablar de los "psicópatas" desde una teoría "criminalística" que pasó de considerarlos una forma de comportamiento, a afirmar que son algo así como una raza aparte.  Siempre que se empieza buscando bases biológicas para una conducta, se termina llenando una fichita del Ku-Klux-Klan. Para no andar con vueltas, la experiencia me llevó a convencerme de que existen conductas psicopáticas que son aprendizajes sociales. Son formas de relacionarse con los demás, que tanto pueden tener un rol central y exclusivo para tal o cual individuo, como pueden ser simplemente parte de un repertorio con mayor o menor "facilitación". Cuando digo esto, quiero hacer hincapié en que hay una gradación continua en cuanto a la probabilidad de que una respuesta se elija antes que otras. Esa probabilidad depende tanto de los modelos de rol históricos en la vida de ese individuo, como de la afinidad de su temperamento con esa respuesta, de la habili

Discutir con psicóticos

Las empresas de comunicación le cerraron la puerta a Donald Trump y sus seguidores, después de tenerlos desparramando intolerancia, discriminación y odio durante años. Por supuesto, el tipo logró lo que se proponía, como todo psicópata bien entrenado: dejó a todo el mundo en falsa escuadra, a todos los pensamientos cayendo en sus contradicciones. Leímos moderados defendiendo a un extremista, socialistas rebuscando en los principios de la libre empresa, progresistas aplaudiendo a magnates. Y en el mismo lodo, todos manoseáus. Esto no es un elogio, ni una crítica a los pensadores. Hay dos razones para que esto pase una y otra vez: La primera es que toda filosofía es esencialmente contradictoria, sólo hay que seguir lo suficientemente lejos un hilo cualquiera de especulaciones correctas, para terminar en el lugar opuesto al de partida. Es como decir que todo el mundo tiene un punto débil, y habiéndolo, tarde o temprano se lo encuentra. La otra razón del éxito psicopático se refiere a la o

Me dijo el psicólogo

"-Y ¿cómo anduvo Celia este mes?¿pudo hacer alguna de las tareas que hablamos? -Y, algo hizo, pero cuesta mucho. Yo le estoy atrás todos los días insistiendo para que lo haga, como usted me dijo... -Pero le dije exactamente lo contrario. -Sí, sí: me dijo que la controle para que haga sus tareas. -Le dije que al final del día le diga qué hizo y qué le faltó, especialmente le dije que no tenía que estarle atrás. -Claro, por eso: que le haga hacer las cosas." Esto es un caso extremo, y bastante patológico, de las metamorfosis que pueden llegar a experimentar las intervenciones de los terapeutas en la cabeza de pacientes y familia. Otro caso precioso que recuerdo es el de uno que le dijo a la familia "El psiquiatra me dijo que si tengo abstinencia de cocaína me fume un porrito". Acá no había interpretación alguna, puro verso de psicópata que no tiene escrúpulos en poner en peligro la matrícula del profesional que trata de cuidarlo. Fuera de estas anécdotas extremas, cua

El tiempo de todos

¿Cuánto dura la sesión? ¿Cuanto tiempo tengo que tomar esto? ¿Cuando voy a salir? ¿Cuándo me van a atender? Cada cuál tiene algo urgente que requiere atención, algo importante que exigir. Y así como la peste desnuda las almas, el tiempo es el alma de los dispositivos modernos de salud. Empecemos por lo más sencillo: El inconsciente es intemporal, por eso las sesiones se pautan en horarios fijos, pero los tratamientos no tienen fecha de terminación. Ahí tienen uno de los motivos del romance de la sociedad actual con las terapias breves, focalizadas, cognitivo-conductuales: que se pueden terminar. Prometen limitarse a resolver UN problema, el motivo de consulta, y listo. Que pase el que sigue. Seamos honestos, la disposición del tiempo de todas las terapias resulta de las necesidades del profesional. ¿Por qué se atiende en horario fijo? Porque la sala de espera y la recepcionista son un lujo inalcanzable. Porque si uno es Lacan, tiene un caserón con varios consultorios y los va visitand